¿Qué podemos hacer como familias de una comunidad educativa para apoyar la educación inclusiva?

Como lo mencionamos antes (ver pestaña:¿Cómo garantizar desde la familia la inclusión educativa de nuestra hija o hijo con discapacidad?) Todos quienes hacemos parte de una comunidad educativa tenemos actitudes o tomamos acciones que pueden favorecer o entorpecer la implementación de la educación inclusiva.

Si en mi familia no hay una persona con discapacidad, o cualquiera de las condiciones que son propensas a la exclusión, puedo pensar que la educación inclusiva no tiene ninguna relación conmigo o mi familia.

 

Pero la realidad es diferente. Como parte de la comunidad educativa, las actitudes de nuestra familia hacia la inclusión van a tener una influencia en las actitudes de nuestras hijas e hijos. Si nosotros todo el tiempo hablamos de aquellos estudiantes con discapacidad de manera ofensiva, lo más posible es que nuestras hijas e hijos, hagan lo mismo. Si nos quejamos de que haya ajustes razonables para ellos, las directivas, y el profesorado, van a tener más dificultades para poder implementar lo que algún estudiante necesite para aprender.

Por otra parte, si mi comunidad educativa es una comunidad que valora la inclusión, los ajustes que en algún momento nuestra hija o hijo pueda necesitar (por alguna circunstancia temporal o permanente) van a poder disponerse sin dificultad. La individualidad de nuestra hija o hijo desde la perspectiva de la diversidad va a ser respetada y valorada. Nuestra familia, va a ser respetada y valorada. La garantía de los derechos de todas las personas se vuelve costumbre en la comunidad. Y esto beneficia a todas las familias. No sólo a unas pocas.

Entonces como familias de una comunidad educativa, podemos ser un apoyo para la educación inclusiva. Es cuestión de concientizarnos y pensar en las formas en las que nos podemos implicar.